Un proceso para comunicarte mejor con un estudio o tu diseñador gráfico
He trabajado con personas que han utilizado servicios de otros diseñadores y quienes han venido a mí porque con ellos algo no funcionaba. Se acercan a mí seguros de que yo, al menos podré escucharlos, lo cual me halaga, pero de entrada les digo que estableceremos un proceso de trabajo y es allí entonces, donde comienza la diferencia para resolver su problema.
A todos mis clientes, les tengo que explicar que es algo tan simple como que sean muy claros en lo que solicitan y trato de ponerme en sus zapatos, así que siempre debemos tratar de ver los requerimientos del contratante, tratando de entenderles de la mejor manera lo que dice requerir.
Esto es una pequeña gran diferencia, desde hace más de 25 años comencé a hacer esto y a poner en práctica esta filosofía de trabajo en todos mis negocios, hasta ahora me ha funcionado.
Pero entonces, ¿cuál es la clave? se llama encontrar la conexión, parece algo muy simple pero esa es la verdadera magia que hay que buscar entre un diseñador gráfico y su cliente, debe haber primero conexión para saber manejar la situación y es un desafío para los dos. Sin embargo, he aprendido algunas cosas más a lo largo del camino, para dar el mejor servicio es necesario ¡haber aprendido de los errores!
Los diseñadores y cualquier persona con la que trabajes es un profesional que no entiende de inmediato lo que quieres. Por eso es necesario que comiencen una relación de trabajo donde se debe llegar a esa conexión entre ambos.
Mi labor como diseñadora gráfica es enviarte cuestionarios y conversar ya sea presencialmente o en línea para irle dando formas a tus ideas con mi conocimiento. Ahora te contaré lo que los diseñadores más expertos recomiendan que hagas tú como cliente:
1. Asegúrate de ser honesto y explica bien lo que quieres y explica por qué. Es tu negocio y es importante que lo ames y presentes tu visión de hacia dónde va.
2. Explica qué cosas te gustaría recibir y el por qué confías en ese estudio o profesional. Dale el tiempo suficiente a esta revisión de lo que te ofrece el estudio de diseño o profesional que contrates.
3. Siempre tómate el tiempo suficiente para repasar lo que te han ofrecido para tu proyecto.
Algo similar a lo anterior, revísalo descansadamente y míralo varias veces de ser necesario.
Dar un visto bueno apresurado o cuando estás estresado(a) o preocupado/a) nunca es una buena idea, el diseño es un trabajo profesional y requiere de tu revisión ya que pagarás por ello.
4. Piensa en tu mercado objetivo todo el tiempo. Tú debes amar tu negocio, y precisamente porque es algo que te importa debes llegar a tus clientes potenciales y seguir conquistando a quienes ya te siguen. No permitas que un diseño se aleje de tus objetivos.
5. Proporciona los datos y hechos más detallados.
Los diseñadores no somos lectores de mente por lo que, entre más información reciben o más datos nos proporciones, más fácil será nuestra tarea, por eso cerciórate de que entregar cosas útiles, así nos permitirás ser creativos y desde luego hacer mejores cosas por el proyecto que has encargado o contratado.
Así que, si estás pensando en contratar un estudio creativo, cualificado que pueda comprender y responsabilizarse de diseños bellos y muy vendedores, entonces ¡Confía en nosotros!!! Déjanos tus preguntas y platiquemos, seguro tu próximo proyecto lo podremos crear para ti.
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